EL PODER PSICOLÓGICO DEL DISEÑO
Los nuevos espacios de trabajo apuestan por eliminar barreras. Frente a la compartimentación de antaño se impone ahora lo diáfano. Y lo mejor de todo, se demuestra que este formato eleva la productividad.
La psicología se ha convertido en uno de los factores clave a la hora de definir los nuevos espacios de trabajo. Toda empresa busca mejorar su rentabilidad y multiplicar sus ganancias, y en este sentido ha quedado demostrado que el diseño también puede desempeñar un papel esencial en el camino hacia dicho objetivo.
De esta manera las oficinas abiertas han ganado la batalla a las más tradicionales y cerradas. Los espacios de trabajo contemporáneos tienen líneas puras y espacios fluidos, conforman un único espacio libre, abierto, transparente y se diferencia del espacio tradicional que era delimitado, discontinuo y estático.
Los antiguos espacios han dado lugar a ámbitos vanguardistas y renovados basados en dos pilares: la colaboración y la flexibilidad. Son espacios para estimular la interacción e incorporan una herramienta más, comunica a los clientes el valor de transparencia empresarial.
El interior responde a la necesidad de infundir una vida saludable y ordenada
Los conceptos que se solicitan para la construcción de espacios de trabajo las utilizan grandes empresas como “el gigante de internet” donde la flexibilidad es una premisa y los nuevos esquemas de trabajo cada vez están dirigidos hacia la socialización y el trabajo grupal.
Está demostrado: este tipo de configuraciones incide directamente en la productividad de la empresa. Estos recursos arquitectónicos y de diseño interior han sido tomados por las medianas y pequeñas empresas hoy en día, donde el resultado es encontrar espacios cada vez más abiertos e integrados para generar versatilidad fomentando así, la comunicación visual y la sensación de amplitud. De esta manera se desdibujan las jerarquías empresariales al disolverse el límite extendiéndose hacia un espacio continuo por todo el interior.
Una tendencia muy contemporánea es la de reciclar viejos edificios para oficinas transformándolos en grandes plantas libres. En estos edificios hay un especial interés en resaltar los elementos estructurales lo cual otorga un valor estético añadido y una mayor fuerza interior destacándolos con la combinación de los intensos blancos para proporcionar mayor luminosidad.
El diseño de nuestra empresa define su forma de trabajar con compromiso y calidad.
El vidrio es el material arquitectónico más utilizado por ser estéticamente más atractivo al ejercer la función de paramento vertical, separa de forma física pero no visualmente. Los espacios transpiran. Es sabido que los materiales en las oficinas juegan un papel importante, a parte del ya mencionado, son también muy utilizados los policarbonatos y los acrílicos por permitir permanentes transformaciones, según las dinámicas siempre cambiantes de las empresas.
En cuanto al mobiliario, para la zona de trabajo prima la utilización del almacenaje como elemento divisorio lo cual permite general islas o centros de trabajo que resuelven las distintas necesidades sectoriales operativas.
La empresa es donde estamos más horas diarias y un buen diseño interior es necesario. La ventaja es evidente: tener esta fluidez espacial en el trabajo demuestra aumentos en la productividad en las empresas además de crear más comunicación entre los empleados donde todos están a la vista de todos. La evolución de estos espacios van de la mano del desarrollo de la última tecnología (el simple cambio del grosor de los monitores, la cada vez más presente ausencia de cables), el orden y la limpieza visual son necesarios en el día a día.
Todo se traduce a una experiencia sensorial